Mentes creativas 1

La semana pasada comenzamos el proyecto “Nuestros mayores” con la finalidad de conocer cómo era la sociedad, la cultura, los juegos, la ciudad… de nuestros abuelos y abuelas; así como, estrechar lazos entre la familia y la escuela  haciendo visible la importancia que tienen en la educación y formación de sus nietos y nietas.

Como motivación y punto de partida nos visitó Antonio, un abuelo que solicitaba la ayuda de los niños y niñas de nuestra clase. Nos dijo que su nieto le había llevado un sobre con fotografías de juegos antiguos que él desconocía y necesitaba que investigasen cómo se jugaban para poder jugar con él. Algunos de ellos los conocían y le enseñaron a jugar, pero otros no y pensaron que podían pedir ayuda en casa; como eran fotos muy antiguas se lo dirían a sus a abuelos y abuelas.

Al ver esta foto Enrique, un niño de 5 años, explicó que se jugaba con piedras y con tubos. Un reto que nos llevó a pensar en pequeños grupos cuáles serían las  reglas del juego. Éstas son sus ideas:

Grupo 1: Meter las piedras por el tubo.

• Gana la piedra más pequeña, es la más rápida, más veloz, tiene más energía que todas, tiene mucha más fuerza.

Grupo 2: Lanzar las piedras para meterlas por el tubo.

• Lanzamos la piedra, si entra gana y si se sale pierde.

Grupo 3: Meter 3 piedras a la vez por el tubo.

• Para saber quién ha ganado apuntamos su nombre en una libreta.
• Cuando oímos el ruido, sabemos quién ha ganado.
• ¿Cómo sabes qué piedra ha ganado?, primero he oído ese ruido, por eso sé que ha ganado esa piedra.
• La que caiga fuera ha perdido.
• Lo tenemos que grabar para saber quién ha sonado más alto.
• Levantamos el tubo para saber la piedra que ha caído

Grupo 4: Poner las piedras en el centro, las metemos por el tubo y gana quién tiene más piedras. ¿Cómo sabemos quién tiene más piedras?

Metemos las piedras, gana el que tiene más piedras	Hacemos una montaña, la más grande gana. ¡Qué difícil!, se caen.
	Las ponemos en fila, la más larga gana

Una propuesta, surgida de la vida del aula, en la que se hace necesaria la escucha, el trabajo cooperativo, el respeto, la resolución  de conflictos, el aprendizaje por descubrimiento, el pensamiento divergente…,  y mucho interés por seguir creciendo  juntos.

Gracia Moya