Es lo que pasa cuando el duende que vive en la caja de marionetas de contar cuentos se lleva a los tres cerditos y así nos lo hace saber en una carta: que no tenemos más remedio que escribirle pidiéndoselos, porque sin ellos la seño no se acuerda bien de cómo contar el cuento. Sólo llevamos algunos días en el cole pero traemos ideas de cómo se escribe, cada uno las nuestras. Sobre todo sabemos que escribir es generar un pensamiento, aun cuando la mano está desentrenada y no hemos construido aún el sistema lingüístico que nos permite que nuestras ideas sean “leidas” por los alfabetizados. Son los albores de un largo camino lleno de emoción, retos, tiempos de espera y maravillosos momentos al amparo del texto escrito.
(Blanca Aguilar)
Que alegría ver esos escritos de niños tan interesados por expresar y que pesar entra cuando ves que en una escuela un maestro no deja tiempo a la expresión o a la creatividad sino meramente al copiado repetitivo y sin sentido, pos no encuentra valor ninguno a la expresión de un niño.
Que difícil luchar, pero ahí seguimos, gracias por ir abriéndonos el camino.
Gosh, I wish I would have had that inamioftron earlier!